Magnífica profesora
Admirable como
ninguna
Caminare sobre tus
pisadas
Andaré sobre tus
andadas
Reclamare sabiduría
Entrare en la filología
Nada me hará salir de
esta cuna
Aunque digas que estoy
en la Luna
Merece una alabanza
Entonada por el mejor juglar
Lo menos es, por sus
palabras
¿O es lo mejor por
enseñar?
Gritan su nombre los
libros,
Reescritos y por
escribir,
Animando a los nuevos
Caminantes del
sendero,
Infantes ellos de la filología.
A delante seguir y poder así
Sentir, hablar y la
lengua escribir.